viernes, 26 de febrero de 2016

Tierra



No fue la suerte, no lo fue en realidad.
Llegué y no lo puede evitar.
Sentir el dolor de este mundo que no deja de llorar.
Llámalo un sentimiento especial.
Una forma de ver o de admirar.
No odio, solo que no dejo de sufrir.
Al ver las penas y esas formas de destrucción total.


De la tierra salimos y del mar nos crearon.
Esto es lo natural, lo antinatural es la creación.
Es así, es la verdad.
¿Pones tu fe en cosas que nunca se demostraran?
Mejor gastala en amar este mundo y su forma natural.
Déjate las manos en este mundo que cuidar.
La gente pasa y se va, el planeta siempre se quedará.

De la tierra a la muerte hay un paso.
Solo uno, uno que puede valer de algo.
Si pasas y solo quieres que te lleguen a olvidar.
Intentemos marcar la diferencia.
Solo esta vez, solo una en realidad.
Un pequeño gesto deberá bastar.
Uno cada uno y esto se superara.


Por una vez debemos escuchar.
A este planeta que no deja de llorar.
Pidiendo clemencia antes de atacar.
La ira planetaria nos va a arrasar.
¿Dejaremos que llegue a pasar?
Muy a mi pesar así será.
Lo podrás observar.

Este planeta pide que des un poco más.
De esos sentimientos que decidimos ocultar.
De esta forma de amar.
Que le regalemos un poco para variar.
Para podernos superar.
Como una raza especial.
Ella nos deja respirar, devolvamos un poco nada más.


Todos lo podemos lograr.
Evitando las cosas que la llegan a dañar.
Pero como sociedad somos una bestialidad.
Queremos más, exigimos como los que más.
¿El planeta se puede quejar?
¿Le queremos escuchar?
Escúchalo gritar.

Gritos silenciosos que acallar.
Pequeños detalles que podemos completar.
Para sentir esta especialidad.
Que nos regalo un planeta singular.
No hay muchos que podamos encontrar.
Pues cuidemos este.
Antes que se vuelva a rebelar.

 

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