Las cadenas

Cadenas, nos apresan, no nos dejan escapar.

Las cadenas de la necesidad.

Las cadenas que más cuesta soltar.

Son aquellas que tú llegas a necesitar.

Depender demasiado de los demás.



Las cadenas del confort, especiales nada más.

En las que te apoltronas y no te moverás.

Allí donde lo malo se convierte en bienestar.

Donde decides reposar en una larga eternidad.



Las cadenas de la libertad.

Que cuando las pruebas no te quieres soltar.

Cuesta de nuevo fiarse de los demás.

Volver a entregarte para variar.



Las cadenas de un miedo que llega a ahogar.

Cuando tiemblas y no sabes reaccionar.

Ellas te apresaran de verdad.

Difíciles de ocultar a los demás.



Las cadenas del rencor, perdiendo el control.

Con ellas en el movimiento te puedes dañar.

Arrástralas seguro que te apagarán.

Mejor alejarlas de donde estás.



Las cadenas que muchas cicatrices pueden ocasionar.

Si intentas escapar, si las deseas cortar.

Respira fuerte y prepárate a batallar.

Va a resultar difícil escapar.



Las cadenas del amar.

De estas se que jamás me lograré soltar.

Me siento a gusto cuando aprietan de verdad.

Reviso con cuidado el candado para no escapar.



Hay cadenas que te llegan a gustar.

Esas son las más peligrosas en verdad.

Sentirás como ellas te arroparan.

Es una ilusión difícil de dejar atrás.



Las cadenas del tiempo que no deja de pasar.

Imposible de detener, imposibles de evitar.

Ahoga poco a poco en cada minuto que puede pasar.

De estas, te guste o no, nadie puede escapar.



Las cadenas del dolor que te contamina.

Son venenosas, cuidado si intentas escapar.

Si te hiere esa herida no se cerrará.

Solo debes dejar de pelear.



Cometí mil errores y paseé sin control.

Amputé partes de mi para poder huir.

Vencedor, me quedé un momento las que llegué a necesitar.

Las cadenas que te llegan a contaminar.



Veo gente como fantasmas que no las dejan de arrastrar.

Las veo cada día al pasear.

Algunos añaden eslabones pero así no quedan atrás.

Eso solo crea la ilusión de que dejaron de apretar.



Las cadenas que nos apresan no dejándonos corretear.

Avanzar en la única vida que tendrás.

Saltar y volver a saltar para respirar.

Fíjate y suelta las que puedes portar.